Ficha de la película:
Nombre original: Casino Royale
Director: Martin Campbell
Guionista: Neal Purvis, Paul Haggis y Robert Wade/ Basado en el personaje creado por Ian Fleming
Actores: Daniel Craig, Eva Green, Mads Mikkelsen
Duración: 144 minutos
Año: 2006
Productora: Sony Pictures.
La vigésimo primera película (Si descartamos parodias y demás…) de James Bond anunció una polémica porque no iba a traer el típico James Bond, si no uno más maduro y más cercano al que creara en su día Ian Fleming. Eso en la teoría, porque cogieron a Daniel Craig para hacer de Bond (¿Lo hicieron para levantar revuelo y vender más? ¿Porqué eligieron un James Bond rubio?...) y al director de GoldenEye para hacerlo realidad. A ver el resultado…
Como era de esperar en una superproducción de Hollywood, tiene una ambientación muy lograda. Todos los sitios que visita Bond dan el pego con mucha elegancia, y todos los elementos típicos que acompañan al agente 007 están presentes. La iluminación (E incluso el tratamiento del color) está utilizada con mucho acierto durante todo el filme, ayudando a recrear el casino y lo demás. Los coches dan la talla (Y vaya si la dan… Yo quiero uno de esos por Navidad) y la caracterización del malo de turno suficientemente grotesca para ser un malo Bond y los trajes del Agente Secreto muy conseguidos (Incluso con risas a su costa). Los efectos de sonido son muy buenos, con unos disparos con silenciador más estruendosos de lo que nos tiene habituado Hollywood (O sea, como son de verdad) y muchos sonidos de ambientación (Ese vaivén de la cuerda da auténtica grima…) Pero hay un problema ¿Dónde están las tías buenas en los créditos iniciales? Que sí, que la trama transcurre en un casino, alrededor de una partida de póker, pero ¿¿Porqué usar los palos de la baraja francesa para los créditos?? ¿Y las jamonas de movimientos sexys? Muy mal, señor Campbell… No se debe jugar así con los sentimientos de los fans…
Al menos el señor Campbell se redime con la elección de los personajes. Tanto Bond como su chica dan la talla e incluso la superan, regalándonos con los mejores flirteos desde la era Connery (Y es que Pierce Brosnan ni lo intentaba. Las tías se quitaban las bragas nada más verle). Los (poquísimos) secundarios también consiguen meternos en el mundillo, y el malo está muy conseguido. Hay alguna escena en que Craig no se sabe si está riendo o conteniendo el llanto, porque pone cara de tipo duro y no le sale mucho, pero en el 90% del tiempo, lo hace bien. M es demasiado benévola con Bond, mostrando una dualidad que es, cuánto menos, rara. Pero el conjunto general es el mejor (Al menos yo así lo creo) que he visto en una película Bond.
Pero lo mejor de la película es el guión. Tiene unos diálogos cojonudos, dando giros de tuerca a los tópicos Bond y mostrándonos el porqué de algunos de sus puntos más habituales. La trama es lo suficientemente interesante para enganchar, aunque bastante tontas y previsible. De todas formas, tampoco lo intenta. Los ligoteos de Bond son para quitarse el sombrero y las escenas de acción están enlazadas con bastante naturalidad. No sé si es fiel a la novela en que se basa, pero la verdad es que es un guión muy sólido, estable y entretenido, con diálogos inteligentes ¿Quién quiere más? Un aplauso, de verdad.
El director de esta cinta coge el toro por los cuernos y nos da escenas MUY originales como la persecución a lo Yamakasi o la carrera por la pista. La verdad es que consigue sorprender en muchos momentos con golpes imprevisibles de la acción… y todo sin tiempo bala. Hay planos realmente preciosos y, aunque las peleas se ruedan desde muy cerca, no resultan para nada liosas (Y mira que yo me meto con esa forma de dirigir peleas…) y quedan bien, porque se alternan con planos generales que te dejan comprender el desarrollo de la acción. Pero aunque sean muy originales, no consiguen trasmitir auténtica y completa emoción, aunque siguen impresionando. Respecto a los actores, se nota que se eligieron con delicadeza y buen gusto y que se sentían cómodos en el plató. Muy bien.
La música es muy buena, aunque se usa demasiado la canción principal de la película (Que es menos cañera) en detrimento de la canción principal de la saga. Aunque me gusta el tema “You Know My Name” (Por supuesto, más que el “Die Another Die” de Madonna), creo que no acompaña a la acción, y sospecho que es por eso por lo que no terminan de convencerme las escenas de ese tipo. Además, no se utiliza todo lo que debería.
La mejor partida de póker que he visto en el cine transcurre durante esta película. Ni siquiera en Rounders conseguían transmitir toda la emoción. Y eso es por el montaje. Las partidas son algo muy estático, así que para no aburrir tanto se meten escenas de otras cosas de por medio, consiguiendo un efecto fantástico. Pero la película peca de poco emocionante. Para ser Bond, casi no hay explosiones y las escenas de acción no consiguen llegar al ritmo frenético de GoldenEye o A View to a Kill, dejando el ritmo estable en una zona que ni cansa ni aburre. No está mal, pero el problema es que tiene un epílogo demasiado largo, y tarda en cerrar las cosas mucho tiempo (Más de media hora), dando la impresión del fuelle apagándose.
En definitiva, creo que es la mejor película de Bond. Al menos, es la mejor que he visto. Además es la presentación del nuevo 007, lo cuál es un mayor atractivo para verla. Recomiendo a todo el mundo que la vea, porque merece la pena, pero si esperas acción desenfrenada… mejor deberías replanteártelo.
Nombre original: Casino Royale
Director: Martin Campbell
Guionista: Neal Purvis, Paul Haggis y Robert Wade/ Basado en el personaje creado por Ian Fleming
Actores: Daniel Craig, Eva Green, Mads Mikkelsen
Duración: 144 minutos
Año: 2006
Productora: Sony Pictures.
La vigésimo primera película (Si descartamos parodias y demás…) de James Bond anunció una polémica porque no iba a traer el típico James Bond, si no uno más maduro y más cercano al que creara en su día Ian Fleming. Eso en la teoría, porque cogieron a Daniel Craig para hacer de Bond (¿Lo hicieron para levantar revuelo y vender más? ¿Porqué eligieron un James Bond rubio?...) y al director de GoldenEye para hacerlo realidad. A ver el resultado…
Como era de esperar en una superproducción de Hollywood, tiene una ambientación muy lograda. Todos los sitios que visita Bond dan el pego con mucha elegancia, y todos los elementos típicos que acompañan al agente 007 están presentes. La iluminación (E incluso el tratamiento del color) está utilizada con mucho acierto durante todo el filme, ayudando a recrear el casino y lo demás. Los coches dan la talla (Y vaya si la dan… Yo quiero uno de esos por Navidad) y la caracterización del malo de turno suficientemente grotesca para ser un malo Bond y los trajes del Agente Secreto muy conseguidos (Incluso con risas a su costa). Los efectos de sonido son muy buenos, con unos disparos con silenciador más estruendosos de lo que nos tiene habituado Hollywood (O sea, como son de verdad) y muchos sonidos de ambientación (Ese vaivén de la cuerda da auténtica grima…) Pero hay un problema ¿Dónde están las tías buenas en los créditos iniciales? Que sí, que la trama transcurre en un casino, alrededor de una partida de póker, pero ¿¿Porqué usar los palos de la baraja francesa para los créditos?? ¿Y las jamonas de movimientos sexys? Muy mal, señor Campbell… No se debe jugar así con los sentimientos de los fans…
Al menos el señor Campbell se redime con la elección de los personajes. Tanto Bond como su chica dan la talla e incluso la superan, regalándonos con los mejores flirteos desde la era Connery (Y es que Pierce Brosnan ni lo intentaba. Las tías se quitaban las bragas nada más verle). Los (poquísimos) secundarios también consiguen meternos en el mundillo, y el malo está muy conseguido. Hay alguna escena en que Craig no se sabe si está riendo o conteniendo el llanto, porque pone cara de tipo duro y no le sale mucho, pero en el 90% del tiempo, lo hace bien. M es demasiado benévola con Bond, mostrando una dualidad que es, cuánto menos, rara. Pero el conjunto general es el mejor (Al menos yo así lo creo) que he visto en una película Bond.
Pero lo mejor de la película es el guión. Tiene unos diálogos cojonudos, dando giros de tuerca a los tópicos Bond y mostrándonos el porqué de algunos de sus puntos más habituales. La trama es lo suficientemente interesante para enganchar, aunque bastante tontas y previsible. De todas formas, tampoco lo intenta. Los ligoteos de Bond son para quitarse el sombrero y las escenas de acción están enlazadas con bastante naturalidad. No sé si es fiel a la novela en que se basa, pero la verdad es que es un guión muy sólido, estable y entretenido, con diálogos inteligentes ¿Quién quiere más? Un aplauso, de verdad.
El director de esta cinta coge el toro por los cuernos y nos da escenas MUY originales como la persecución a lo Yamakasi o la carrera por la pista. La verdad es que consigue sorprender en muchos momentos con golpes imprevisibles de la acción… y todo sin tiempo bala. Hay planos realmente preciosos y, aunque las peleas se ruedan desde muy cerca, no resultan para nada liosas (Y mira que yo me meto con esa forma de dirigir peleas…) y quedan bien, porque se alternan con planos generales que te dejan comprender el desarrollo de la acción. Pero aunque sean muy originales, no consiguen trasmitir auténtica y completa emoción, aunque siguen impresionando. Respecto a los actores, se nota que se eligieron con delicadeza y buen gusto y que se sentían cómodos en el plató. Muy bien.
La música es muy buena, aunque se usa demasiado la canción principal de la película (Que es menos cañera) en detrimento de la canción principal de la saga. Aunque me gusta el tema “You Know My Name” (Por supuesto, más que el “Die Another Die” de Madonna), creo que no acompaña a la acción, y sospecho que es por eso por lo que no terminan de convencerme las escenas de ese tipo. Además, no se utiliza todo lo que debería.
La mejor partida de póker que he visto en el cine transcurre durante esta película. Ni siquiera en Rounders conseguían transmitir toda la emoción. Y eso es por el montaje. Las partidas son algo muy estático, así que para no aburrir tanto se meten escenas de otras cosas de por medio, consiguiendo un efecto fantástico. Pero la película peca de poco emocionante. Para ser Bond, casi no hay explosiones y las escenas de acción no consiguen llegar al ritmo frenético de GoldenEye o A View to a Kill, dejando el ritmo estable en una zona que ni cansa ni aburre. No está mal, pero el problema es que tiene un epílogo demasiado largo, y tarda en cerrar las cosas mucho tiempo (Más de media hora), dando la impresión del fuelle apagándose.
En definitiva, creo que es la mejor película de Bond. Al menos, es la mejor que he visto. Además es la presentación del nuevo 007, lo cuál es un mayor atractivo para verla. Recomiendo a todo el mundo que la vea, porque merece la pena, pero si esperas acción desenfrenada… mejor deberías replanteártelo.
Ambientación: 9
Actuación: 8
Guión: 10
Dirección: 8
Música: 6
Montaje: 6
Puntuación final: 7.8
Actuación: 8
Guión: 10
Dirección: 8
Música: 6
Montaje: 6
Puntuación final: 7.8
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