Babel

Ficha de la película:

Nombre original: Babel
Director: Alejandro González Iñárritu
Guionista: Guillermo Arriaga y Alejandro González Iñárritu
Actores: Brad Pitt, Cate Blanchett, Gael García Bernal, Kôji Yakusho, Adriana Barraza

Duración: 142 minutos
Año: 2006
Productora: Paramount Pictures.

La gran promesa de este año es la tercera película del mejicano de apellido impronunciable (Y de apariencia vasco…). Parece que utiliza la misma fórmula, pero en un ámbito cada vez mayor (Primero Ciudad de Méjico, luego una ciudad americana y sus alrededores, ahora cuatro países.) pero ¿La perfecciona o la imita? A ello vamos…

La verdad es que en el aspecto técnico no tiene nada que envidiar a las grandes superproducciones. Los cuatro países representados están perfectamente diferenciados, cada uno con sus peculiaridades y sus rarezas, cada uno con su ropa y sus habitantes. De manera que no hay ninguna duda cada vez que ves un plano, ya que incluso la fotografía los diferencia (Más terrosa en Méjico, grisácea en Egipto, con colores chillones en Tokio y luminoso en San Diego). Todas las ambientaciones tienen un motivo para ser como son, y lo cumplen con creces, no tengo ninguna queja sobre este apartado. Felicidades.

Los actores son extraordinariamente buenos. La japonesa sordomuda lo hace genial, al igual que la niñera mejicana. Los niños egipcios hacen unos papeles totalmente creíbles y naturales, al igual que la mayoría de los secundarios. En Japón los secundarios pierden un poco, por la (Realista) costumbre japonesa de quedarse unos momentos callados antes de contestar la pregunta, momento en el cuál ponen cara de tontos. Brad Pitt y Cate Blanchett hacen un papel normalito, que por momentos parece que no se den cuenta de la gravedad de la situación, igual que sus hijos, que sobreactúan o se quedan quietos cuando no corresponde (Aunque para ser niños, lo hacen francamente bien). En definitiva, unos actores buenos, pero teniendo en cuenta la emotividad de lo rodado, los actores deberían haber sido más expresivos.

El argumento es, como acostumbra en las películas de Iñárritu, algo soso. En esta película las uniones entre historias son más bien laxas y en el caso de la japonesa, casi inexistentes. Las historias son lo suficientemente diferentes para que no exista sensación de Dejavú, pero los diálogos son bastante insulsos. Es una película donde es más importante lo que se calla que lo que se dice, pero eso no es excusa para que los diálogos sean aburridos. La trama fluye sin lagunas y la sensación de desespero va lenta pero segura hasta el momento final del film, lo cuál es una de las grandes bazas de la película. Tampoco estaría de más explicar por qué cojones la película se llama Babel, que no se explica.

Iñárritu realiza su mejor película hasta la fecha. La utilización de ese pequeño cuarto en Egipto donde se encuentran Brad Pitt y su mujer es agobiante, esa oscuridad que envuelve a la niñera en la frontera con EEUU, esos planos sostenidos de Japón en silencio, unidos a la impotencia de la chica. Todos los turistas atosigando a Brad Pitt, la sensación de indefensión de Gael García Bernal, etc. Todo funciona. Iñárritu siempre ha sido muy meticuloso con sus rodajes, y eso se nota con un exceso de planos detalle que pueblan el film, lo que ralentiza la acción, aún así es increíble la capacidad que tiene este hombre de mostrar planos preciosos en lugares feos. La sensación de agobio y desespero es total y se respira en cada plano. En definitiva, una gran dirección.

La banda sonora de la película no es nada realmente interesante. Se compone de dos notas que se repiten hasta la extenuación. La verdad es que funciona para complementar la acción, pero cansa escuchar la misma canción durante todo el metraje. Existen muchos momentos en que el silencio debería llenarse y otros en que éste se necesita, pero en general, está bien utilizada.

El montaje es algo importantísimo en cualquier película de Iñárritu, y en este caso ha optado por un montaje parecido al de Amores Perros, pero a diferencia de su ópera prima, Babel cuenta las tres historias a la vez, eludiendo así ese cansancio de ver 3 arcos argumentales seguidos. Aquí la tensión de las tres tramas transcurre a la vez, llegando a sus respectivos puntos álgidos a la vez y, por lo tanto, complementándose. La película mantiene un buen ritmo y angustia con el tono justo y necesario. El único problema es que el final no es todo lo emotivo que debería (Quizás por culpa de los actores) y da una ligera sensación de estar inacabada, aunque es probable que fuera la intención del director.

En definitiva, es una gran película que se llevará grandes premios (Ya se ha llevado algunos de los más importantes) y que debería ver todo el mundo. Muy recomendado.

Ambientación: 10
Actuación: 8
Guión: 7
Dirección: 9
Música: 5
Montaje: 9

Puntuación final: 8